Javier Blanco, novillero

Javier Blanco de 20 años es un chico de Santander, que lleva tiempo trabajando para en un futuro conseguir su gran sueño, ser matador de toros, como así nos dice en esta entrevista. Comenzó en la ya muerta escuela taurina de la Carmencita y actualmente es ayudado por el ex matador de toros cántabro, David Gutierrez.

¿Quién es Javier Blanco?

Javier Blanco es amante del arte en general, un enamorado del sur, que sueña con ser algún día matador de toros.

Es muy fácil apuntarse a un equipo de fútbol, de baloncesto etc.¿Qué te llevo a ir a una escuela taurina?

La verdad es que la afición al mundo del toro me llegó relativamente tarde, sobre los 13 años. Antes nunca había asistido a una corrida de toros y no sabía muy bien lo que era aquello, pero a esa edad decidí ir por mi propia cuenta a la plaza y cuando salí ese mismo día ya tenía muy claro lo que quería ser. En esos momentos pensé: esto es lo mío.

En cuanto a tu familia ¿Cómo se tomaron y se toman los riesgos que corres para llegar a ser máxima figura del torero? Ese es el deseo de todos los novilleros que empezáis supongo

En un primer momento la respuesta de mi madre al decirla que me quería apuntar a la escuela taurina fue un no rotundo, pero finalmente ante la insistencia acabó cediendo. Las que más sufren cuando toreo son mi madre y mi abuela, mi padre es más duro y me dice que si quiero ser torero que entrene todos los días, que vaya al gimnasio y esas cosas. Y bueno, mis hermanos la verdad es que están encantados y siempre que pueden van a verme.

Junto al maestro Talavante

Cómo recuerdas esos años en la escuela taurina de Santander?

Pues fueron años muy bonitos, era un chico ingenuo que soñaba con ser torero y todavía no era consciente de lo duro que es esto. Eso si, desde el primer momento me lo tomé muy enserio, y al salir de entrenar en la plaza continuaba entrenando en mi casa hasta que caía la noche.

Actualmente esta escuela ya no existe, ¿Cuáles han sido los problemas para que esta haya desaparecido?

El motivo fundamental por el que la escuela se disolvió fue por la falta de ayudas por parte del Ayuntamiento, todo era financiado por la Peña taurina la Carmencita, pero con eso no era suficiente; hay que tener en cuenta todos los capotes y muletas, los carretones, los viajes al campo para tentar, etc.

En que momento de tu etapa te encuentras ¿Háblanos de tu pasado y presente?

Han pasado ya casi tres años desde que me puse delante de la primera becerra, a partir de ese momento comencé a ir a tentaderos poco a poco, ha participar en bolsines a nivel nacional y no he dudado en pasar 10 horas en un autobús para ir a torear al sur de España. Este año que viene va a ser el que más voy a torear hasta el momento y estoy muy ilusionado y entrenando más que nunca.

También y como cualquier chaval de nuestra edad, te encuentras en la Universidad, en la facultad de derecho, ¿Es difícil compaginar ambas cosas?

La verdad es que hasta el momento no me ha sido muy difícil compaginar las dos cosas; bien es cierto que dedico mis días prácticamente a eso: estudiar y entrenar, pero no me supone un problema, pues entrenar es mi “hobbie” y cuando no puedo por lo que sea no se que hacer (risas).

¿Es quizás este tu año de decisión?

Mi año de decisión no lo se, lo que si sé es que es un año muy importante en mi carrera, como he dicho antes, este va ha ser el año que más voy a torear, voy a estar presente en prácticamente todos los bolsines a nivel nacional (un bolsín es como un “concurso” entre novilleros) y probablemente a mediados de año tenga algún compromiso importante del que dependerá mi futuro como torero.

En la pasada temporada, hiciste tu primer paseíllo de luces, participaste en varios tentaderos e incluso visitaste invitado la finca de uno de los ganaderos con mas nombre de España, Fermín Bohórquez ¿Cómo afrontas la nueva temporada, háblanos ahora de tu futuro inmediato?

La pasada temporada tuvo dos momentos muy importantes; uno de ellos fue una tarde de mayo en Villamediana de Iregua, un pueblo de la Rioja, donde entré por sustitución en un cartel donde se encontraban los novilleros sin picadores punteros del escalafón, la plaza estaba llena y fue un momento de mucha responsabilidad. Al final las cosas salieron bastante bien aunque uno pocas veces se va satisfecho del todo.

Otro momento importante, posiblemente la tarde más emotiva hasta el momento en mi carrera, fue el debut de luces en Nájera. Es algo con lo que sueñas desde que empiezas en este mundo.

Este verano en una entrevista en el Hotel Real de Santander, en la que estaba presente Fermín Bohórquez, me invitó a su finca para tentar unas becerras. En septiembre estuve por allí junto al matador de toros “Jesuli de Torrecera”, y la verdad es que muy bien.

En estos momentos me encuentro entrenando al máximo y sobretodo muy mentalizado. En las próximas semanas viajaré por la zona de Salamanca para tentar algunas becerras que me sirvan de preparación para la temporada que viene, que si Dios quiere comenzará en enero en Tudela.

¿Realmente existe esa bajada de nivel de los toros de la que hablan algunos entendidos?

Es cierto que este año 2010 ha sido un tanto desastroso en cuanto al nivel del ganado, han acusado falta de fuerza, falta de casta en sus embestidas... Sin embargo, creo que hoy en día la selección en las ganaderías es la más alta que ha habido en toda historia, las vacas que se aprueban para madres suelen tener una nota altísima, y en cambio, luego vemos un desastre en la plaza. Es posible que se esté pecando de buscar una embestida demasiado noble y buena para el torero y no de buscar la casta y la fuerza que debe tener un toro bravo.

Para terminar, el interrogatorio

Una ciudad: Sevilla

Un lugar para estar: El campo

Una comida: La pasta en general

Una canción: Cuando nadie me ve, cantada por Niña Pastori

Una película: La leyenda de Bagger Vance

Un libro: Juan Belmonte, matador de toros

Un personaje: Jorge Bucay

Un torero: Morante de la Puebla

Una persona que odias: odiar es dar demasiada importancia a una persona

Un deseo: Ser matador de toros

En Santander en 2009

Mario Vara

estudiante de bachillerato, Colegio la Paz, Torrelavega (Cantabria)