Se trataba de un evento deportivo que se celebraba cada cuatro años, el tiempo que duraba se conoció con el nombre de Olimpiada, había participantes y público de toda Grecia y también de fuera. Se llevaron a cabo entre el 776 a.C. y el 393 d.C, estos juegos fueron bastante diferentes a los que conocemos en la actualidad, con muchas menos pruebas, las mujeres no competían sólo lo hacían los hombres libres y se llevaban a cabo las pruebas en el mismo lugar.
Representaban
el acontecimiento cultural más importante de la antigua Grecia, se cree que
Alejandro Magno fue uno de sus participantes más celebre, y compitió en carrera
de carros. Hubo 293 olimpiadas consecutivas, hasta que en el 393 d.C. con la
llegada del cristianismo como la religión oficial del Imperio Romano fueron
prohibidos.
En un principio
se asociaban los juegos con rituales funerarios, de héroes o caídos en
batallas. Para el pueblo griego el deporte, el cuerpo sano y el espíritu
competitivo eran muy importante en la educación griega, por lo que era muy
común que organizarán competiciones atléticas.
Se apunta por
un lado a un origen mitológico, creado por Heracles Ideo, que propone a
sus hermanos una carrera y el que ganara seria premiado con una corona, y fue
quien decidió que los juegos se celebraran cada 4 años.
El origen
histórico, en el año
776 a.C, otros lo fechan en el año 884 a.C. Su nombre responde por el lugar
donde se hacían Olimpia, donde estaba el santuario más importante del dios Zeus
y se celebran cada 4 años entre los meses de julio y agosto.
Los juegos
tenían gran importancia social. Se paralizaba toda actividad social, salvo
asuntos urgentes que no podían paralizarse. Acudían de sitios remotos y se
establecían treguas de carácter sagrado, lo que ayudaba al acercamiento y a una
mejora en las relaciones entre los Estados griegos.
La tregua
sagrada comenzaba antes del inicio de los juegos y llegaba a prolongarse hasta
un tiempo después de su finalización; al principio sólo se extendía por tierras
del Peloponeso, pero se acabó extendiendo por todas las ciudades que querían
participar en los juegos; si una ciudad no cumplía esta norma no participaba en
los juegos y si lo incumplía se la sancionaba con multas y sus deportistas eran
sacados de los juegos.
Los
espectadores que
acudían desde todos los rincones de Grecia se alojaban en campamentos, esta
llegada de más gente era aprovechada por los comerciantes, músicos y filósofos
para hacer conocer sus ideas o productos. Participaban de forma activa durante
las pruebas animando a los deportistas y lanzando flores al final de cada
prueba. Las mujeres casadas o viudas ni podían participara ni presenciar las
pruebas, si podían estar chicas jóvenes.
Los atletas a la edad de doce años comenzaban a
prepararse, enseñándoles a desarrollar sus músculos y a controlar sus nervios.
A los dieciséis ya iban al gimnasio, el gimnasio contaba con una pista y
lugares para hacer ejercicio al aire libre. A los veinte años los griegos
acababan su formación deportiva se les hacía entrega de armas y ya se les
consideraba aptos para participar en los Juegos Olímpicos.
Los atletas
competían desnudos para evitar la participación femenina encubierta, y se
untaban de aceite el cuerpo, casi no existen registros de marcas, la idea era
ser el primero entre los mejores.
La condición de
griego era indispensable para poder participar, requisito que desaparece con la
conquista romana. Se cree que los juegos duraban cinco días. Un año antes de
los juegos todos aquellos atletas que querían participar se tenían que entrenar
en sus propias polis (ciudades) y un mes antes en una ciudad situada a 50
kilómetros de Olimpia; un día antes de empezar los juegos, atletas, jueces y
entrenadores dejan esa ciudad, y en Olimpia ante el altar de Zeus, hacían un
juramento de no delinquir, y los atletas juraban también que en los 10 meses
sucesivos habían seguido las normas de entrenamiento.
La prueba más
importante fue durante muchas olimpiadas la carrera a pie del stadium, que
consistía en una carrera de 192 metros, con series preliminares y ya después
los ganadores pasaban a la final. Con el paso del tiempo fueron sumándose otras
pruebas hasta llegar a un total de 18 pruebas repartidas durante los cinco
días. Las pruebas eran supervisadas por jueces, al principio eran cargos
heredados y vitalicios, pero finalmente eran elegidos por sorteo, podían multar
e incluso descalificar al atleta por infringir las reglas, que rara vez
sucedía, pero si sucedía se les imponía multas, si no pagaba, la ciudad a la
que representaba debía hacerlo porque si no se le impedía participar en la
siguiente olimpiada.
Lo más
importante no eran los premios olímpicos sino la gloria y la fama que
alcanzaban, una fama que no desaparecía con el paso del tiempo ya que sus
nombres figuraban para siempre en las listas de los vencedores e incluso las
estatuas que les hacían en su honor.
La primera
mujer ganadora fue en el año 392 a.C. Kiniska, que, aunque no participó fue
ganadora al ser la propietaria de los caballos que resultaron ganadores en una
prueba y es así como consigue su corona de oliva.
FUENTES:
Wikipedia/World History Encyclopedia.
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