Cyberbullling

Andréa Sánchez

El cyberbullying es el acoso que hacen los adolescentes a través del ordenador, teléfonos móviles… Es decir, a través de las nuevas tecnologías que están conectadas a la red.

Si nos preguntamos cómo son las personas que acosan, nos damos cuenta, que en el bullying, estos individuos son físicamente reconocibles. Sin embargo, en el ciberbullying, lo hacen de forma anónima, puesto que el ordenador no tiene ojos, no tiene boca… Y como todo anónimo podemos suponer, que es una forma muy cobarde de actuar.

En cuanto a las personas acosadas, en el bullying suelen ser tímidas, retraídas… Pero en el ciberbullying podemos ser cualquiera, porque todos podemos tener un momento débil, en el que nos pueden afectar estas cosas.

¿Cómo es el cyberbulling?

- Los acosadores pueden suplantar la personalidad de una persona, haciéndose pasar por ella, ofendiéndose a sí misma.

- Se crean perfiles falsos.

- Provocando peleas para grabarlas con los teléfonos móviles y posteriormente subirlas a páginas web, como por ejemplo, youtube.

- Subir fotos que la persona no desea.

- Robar las claves de correos electrónicos.

- A través de mensajes por móviles.

Esos son algunos de los casos del ciberbullying, aunque también, hay muchos más casos y muy variados, todo depende de la imaginación del acosador.

Hay dos tipos de ciberbullying: uno es aquel por el cual un menor acosa a otro también físicamente, es decir, en ese caso hay bullying y ciberbullying; por otro lado está el ciberbullying “básico” que es aquel en el que el menor que acosa no es conocido por el afectado.

Todo esto en España ya es denunciable. Aunque pensemos que hay un vacío legal esto no es así, ya que aunque no existen muchos organismos que se encarguen de esto, si que se puede hacer en la Fiscalía de Menores.

También existen asociaciones de abogados que llevan casos de menores acosados, puesto que nuestro código penal, en su artículo 44, ya castiga todos estos hechos.

Aunque los que practican el cyberbullying piensan que no van a ser detectados, están en un error, puesto que la policía es capaz de rastrear sus ordenadores hasta descubrir el IP y a través de ello, acceder a este tipo de personas.

Generalmente, hasta nuestros días, los hechos no son tan graves como en el bullying y no se suelen llevar a juicio. Según los abogados que se encargan de estos casos, suelen remediarse hablando seriamente con los adolescentes y enseñándoles que lo que están haciendo es cometer un delito, que es denunciable, y castigado por la ley.

El ciberbullying y el bullying tienen el mismo objetivo, que es el acoso entre escolares, agredir al otro menor, pero se diferencia en que en el bullying por la red, la meta se alcanza con mayor rapidez.

Para poder denunciar el ciberbullying es preciso, no destruir las pruebas, intentar adivinar el IP del ordenador del menor, intentar ignorarlo, informar al colegio o al tutor para que trate de evitar este caso, intentar contactar con los padres del agresor (en caso de que se conozca el agresor).

Es uno de los problemas que se están intentando resolver para el futuro, ya que este es un caso muy grave que puede afectar a muchos ámbitos del menor.

Los acosadores suelen ser personas que se pasan el día pegados a la red, porque están enganchados y entonces saben mucho acerca de las nuevas tecnologías.

Este caso debe ser solucionado rápidamente por los colegios, las familias y por los políticos.