sábado, 3 de enero de 2015

Lilypad, una ciudad ecológica y además flotante


Lilypad es un proyecto arquitectónico y ecológico ideado por Vicent Callebaut, con el que pretende afrontar el problema climático al que nos estamos enfrentando, el Calentamiento Global.
Vicent Callebaut, comenzó a pensar en esta idea sobre el año 2008, después de anunciar la ONU que en 2080 se incrementaría el nivel del mar de forma alarmante. Este arquitecto francés, cree haber encontrado con Lilypad una solución a las consecuencias más importantes del Calentamiento Global en nuestro planeta.


Lilypad se trata de una ecópolis presentada como una ciudad flotante en constante movimiento, con capacidad para alrededor de 50.000 habitantes víctimas del cambio climático, y que se situará en la pequeña isla nación de Tuvalu, en el Océano Pacífico. Lilypad se mueve en dirección de las corrientes oceánicas frías y calientes.
La forma de esta ciudad anfibia está inspirada en la flor de nenúfar y tiene una laguna artificial que permite la variedad de especies animales y vegetales. Una de sus principales características es que puede crear su propia flora y su propia fauna, en torno a la laguna central artificial que se originará a través de la depuración del agua de lluvia. También consta de tres puertos y tres montañas, donde habrá comercios y zonas de ocio. Las viviendas se encuentran en jardines, rodeados de calles y callejones. La idea es que el hombre encuentre la armonía con la naturaleza.
Lilypad es autosustentable, habrá cultivos con los que  asegurar la alimentación. Otra fuente de ingresos será el comercio.
Esta ciudad flotante es totalmente ecológica, no admite residuos. Los motores de esta isla funcionan a base de combustibles como la biomasa. Su estructura está cubierta por dióxido de titanio, que impide la entrada del dióxido de carbono debido a los rayos ultravioletas. Utilizará las energías eólica, solar y mareomotriz.
El proyecto Lilypad contará con las más novedosas tecnologías, tendrá sistemas de iluminación por LEDs, reciclaje de desechos y más avances tecnológicos que parecen milagros.
Todavía no se ha estimado su coste y muchos son los que dicen que finalmente solo la élite social podrá aspirar a ocupar una vivienda en esta isla flotante.
Esta ciudad flotante, que aunque parece irreal e imaginaría puede ser una solución rápida y a largo plazo a un angustiante problema que nos preocupa al mundo entero, está prevista para el año 2100, aunque falta el visto bueno de un número de inversores para poder darle luz verde.


Pilar Barquín
Estudiante de bachillerato, Colegio La Paz, Torrelavega (Cantabria)




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Queremos saber tu opinión. Se respetuoso y enriquece a la comunidad

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Comparte este contenido en las redes