Los perros teckel

Son una raza de perros originarios de Alemania. Tiene una peculiar fisonomía que se debe a una mutación genética conocida como Bassetismo, que dota a los ejemplares de unas extremidades muy cortas.

Se encontraron dibujos ya de este perro en el antiguo Egipto, pero proviene de los sabuesos alemanes. Son buenos para la caza de conejos, tejones, liebres y para otros animales que se escondan dentro de las madrigueras. Es una de las razas mas preferidas por los monarcas europeos. Cada año muchísimas familias que tengan teclees se reúnen en ciertas ciudades para celebrar fiestas dedicadas a estos perros.

Su forma es alargada y baja, cola larga, hocico alargado y extremidades muy cortas. Estos perros son muy reconocidos por sus cortas patas aunque esto les permita la entrada a madrigueras para cazar.

En la caza se comporta como un buen rastreador y también son muy valientes ya que son capaces de enfrentarse a un jabalí.

Existen varias variedades de teckels:

-estándar

-miniatura

-teckel para la caza de conejo

-de pelo corto

-de pelo duro

-de pelo largo

Esta raza sufre muchos problemas con los huesos, sobre todo con la columna vertebral. Para evitar esto es recomendable que no salten, ni suban, ni bajen escaleras, pero con una correcta educación deportiva, no tendrán estos problemas. Tienen muy buenos reflejos aunque debido a sus pequeñas patas no alcanzan mucha velocidad. No se le tiene que dar mucha comida para que no engorde mucho y no solo tiene que comer carne.

Es testarudo y no se deja educar, perros difíciles de adiestrar los hay en todas las razas pero este es el más difícil.

Tiene un excelente olfato, puede llegar a hacer el trabajo de un sabueso a su manera. No es un terrier pero trabaja a la genial en las madrigueras. No hay que comparar un perro de caza con otro, cada uno tiene sus cualidades pero el teckel reúne casi todas las cualidades de los demás perros de caza y en manos de un buen cazador que lo sepa adiestrar bien, podrá matar el mismo al zorro o ponérsele a tiro, hará levantarse del agua al pato, es perfecto siguiendo el rastro del jabalí y si hay que enfrentarse a él no dudara en hacerlo.