jueves, 31 de mayo de 2012

Ludopatia

Rubén Martínez

El juego de azar se está convirtiendo en un grave problema en la sociedad actual y esto es debido a que la ludopatía está afectando a muchas personas, alrededor de 500.000 y especialistas afirman que el 5% de la población nacional, sin llegar a ser considerados como ludópatas, tienen problemas con el juego y podrían llegar a padecer el trastorno más adelante. Es más, lejos de disminuir, la cifra ha aumentado un 30% este año, encima cada vez se dan más casos de gente joven que vienen con problemas.

Pero, ¿Qué es la ludopatía?
La Ludopatía es un trastorno crónico y progresivo reconocido por la Organización Mundial de la Salud que desde el año 1992 se encuentra en la clasificación Internacional de Enfermedades.
La ludopatía son las graves dificultades que tiene un jugador en limitar la cantidad de dinero o tiempo que emplea en el juego lo que origina consecuencias adversas para el jugador, para otros o incluso para el ambiente familiar.
Además, se convierte en un impulso irreprimible de jugar a pesar de ser consciente de las posibles consecuencias y de las ganas de detenerse. Por tanto la American Psychological Associación no lo considera como una adicción, sino que se lo considera como un trastorno del control de los impulsos en casos extremos podría llegar a cruzar la barrera de trastorno mental.
Hay muchas razones por las que la gente juega a los juegos de azar pero la más característica es que el juego le brinda la oportunidad de convertir una pequeña apuesta en ganancias increíbles, solo que esta posibilidad es muy remota.
Síntomas:
Las personas que padecen ludopatía pueden padecer los siguientes síntomas:
Preocupación; tiene pensamientos sobre las experiencias pasadas o presentes con el juego. Tolerancia; es un caso parecido a las drogas, la persona apuesta mayores cantidades, en este caso de dinero para poder experimentar la misma emoción. Abstinencia; inquietud asociada al intento de dejar o reducir el juego. Evasión; el sujeto juega y suele jugar para poder mejorar su estado de ánimo o poder evadirse de los posibles problemas personales. Revancha; las personas suelen intenta recuperar las pérdidas de dinero a causa del juego con más juego. Mentiras; el enfermo suele ocultar las cantidades de dinero o tiempo destinadas al juego mintiendo a sus amigos, familiares o terapeutas.
Arriesgar relaciones significativas; el sujeto sigue jugando a pesar de que estos contribuyan a arriesgar o perder un empleo, relaciones u alguna otra oportunidad significativa y por último, recurso a personas ajenas; el sujeto recurre a la familia o amigos para conseguir asistencia financiera para destinarlo en el juego.
Para la solución de este problema, es muy importante el apoyo familiar, la ayuda de un psicólogo y sobre todo, es avanzar un enorme paso, que la persona se de cuenta de su problema y pida ayuda para el proceso de curación.

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