ENTREVISTA - Luis Abarca, Adrian Marcos.
Hemos visitado
hace semanas el CAR de vela, donde un Jan Abascal muy amable nos mostraba los
proyectos del gran centro de vela en que se convertirá Santander en los próximos
meses, de cara al mundial de vela. Mientras nos lo explica, señala con su mano
el muelle. “Ese es el fruto de nuestro trabajo”. Es Berta Betanzos, la campeona
del mundo de 470, que acaba de llegar para iniciar su entrenamiento de la
tarde. Y hacia ella nos dirigimos.
“Empecé con
11 años, mi tío navegaba y a veces salía con él, pero era tan exigente que tuve
que apuntarme a un cursillo. Pronto el mar me encandiló y abandone el hockey
que practicaba. Un buen día Jan Abascal me propuso entrar en el Equipo
Olímpico, y aquí sigo”.
Berta, que
comparte embarcación con la canaria Tara Pacheco, ha renunciado a mucho para
ser una de las referencias de la vela cántabra y española. “No he podido
dedicar todo el tiempo que he querido a mi familia y amigos, incluso he tenido
que elegir la carrera que mejor se compatibilizara con la vela y que no era
exactamente la que más me gustaba”.