Maria González
Estoy harta
de oír que los jóvenes de hoy en día son unos caprichosos, que hacen lo que les
da la gana, que no tienen límites… y a veces me preguntó: “¿será verdad?”
Es cierto
que los jóvenes de hoy en día somos propensos a emocionarnos con todo, a
apasionarnos por cualquier chorrada, a intentar ser mayores lo más rápido
posible…, pero, ¿y las generaciones anteriores no pensaban o sentían lo mismo?
Yo creo que
todos los adultos dicen eso de nosotros para imponernos, para intentar que no
lo hagamos, para que no repitamos sus actos, pero en realidad hasta que
nosotros no probamos esa emoción no sabemos los perjuicios, podemos tener en
cuenta parte de lo que nos dicen, ten cuidado con esto.., ten cuidado con lo otro,
pero ellos no se dan cuenta que a veces para aprender hay que equivocarse, cosa
que no nos permiten. A los jóvenes de nuestra edad nos encantan libros como los
de Federico Moccia o “Sabes que te quiero”, porque para nosotros estos libros
se parecen a la vida real, nos identificamos con ellos de una manera especial y
nos imaginamos que somos los personajes, que vamos viviendo poco a poco los
diferentes problemas que viven los protagonistas y a la hora de ver nuestra
realidad observamos que muchos de los problemas de los libros forman parte de
nuestra vida por lo que intentamos arreglarlo de la manera que se ha
solucionado en el libro, aunque muchas veces no nos salga bien. Podemos decir
que muchos libros son una guía de nuestras vidas por lo que son súper
importantes, pero los adultos no se dan cuenta y pasan de nosotrosNo recuerdan
cuando para ellos eran súper importantes libros como “Rebeldes”, películas como
“Historias del Kronen” o las canciones de Medina Azara, “Los rolling” o
”Aute”.Otra razón por la que los adultos se escandalizan son el tabaco y el
alcohol. Nadie, ni siquiera nosotros, pensamos que no son perjudiciales para la
salud; pero para todo hay una primera edad y los adultos también tuvieron esa
primera vez, sintieron esa emoción y experimentaron con ello.Nuestros padres
siempre se quejan de que somos insoportables, que no pueden con nosotros, que
todo nos parece mal, que contestamos… y puede que sea verdad pero cuando
hablamos con nuestros abuelos, nos dicen que nuestros padres eran iguales.También
se quejan de nuestra ropa, de nuestro estilo, y no se acuerdan que muchos
llevaron pantalones de campanas, permanentes, crestas… Muchos padres odian que
sus hijos lleven el pelo largo y esos mismos padres lo llevaron
también.Nosotros pasamos horas frente al ordenador mientras que las otras
generaciones las pasaron ante la radio, el tocadiscos o la televisión, nosotros
estamos enganchados al móvil y otros lo estuvieron al teléfono fijo.Después de
mucho pensar y escribir, me pregunto: ¿son entonces tan diferentes a nosotros?
, ¿somos nosotros tan diferentes a ellos? O ¿hay algo en común que nos
une?Todos pasamos por la niñez y todos debemos pasar por la adolescencia, por
mucho que los adultos no lo deseen, supongo que algún día yo desee lo mismo que
ellos ahora, pero ahora es el momento en el que me apasionó, me enganchó, me
emociono, pruebo las cosas y me equivoco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Queremos saber tu opinión. Se respetuoso y enriquece a la comunidad