lunes, 20 de marzo de 2017

Friedrich Nietzsche


El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas, a menudo estarás solo, y a veces asustado. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo”



Friedrich Wilhelm Nietzsche, nació el 15 de octubre de 1844 en Röcken, una pequeña ciudad de la Sajonia prusiana, hijo de un pastor luterano, que murío cuando Friedrich tan solo tenía cinco años de edad. La temprana muerte de su padre, hizo que tanto él como su madre y su hermana, se trasladasen a Naumburgo, donde además también vivirá con su abuela y sus tías.


Unos años después, Nietzsche ingresó en el internado de Pforta, que contaba con una gran reputación en la época. En esta escuela, sería donde desarrollaría su admiración por el genio griego, leyendo sobre todo a Platón y a Esquilo, así como por la música y la poesía. Cuando tenía 20 años, empezó a tener sus primeros problemas de salud, que eran caracterizados por sus largos dolores de cabeza, llegando a durar varios días.


En 1864 ingresaría en la Universidad de Bonn donde estudiaría filología, pero tan solo un año después de ingresar en dicha universidad, se trasladó a la Universidad de Liepzig, donde seguiría los pasos de su maestro Friedrich Wilhelm Ritschl, continuando sus estudios filológicos.


Según  pasaban los años, Nietzsche fue radicalizando sus pensamientos más y más, hasta el punto en el que fue perdiendo muchas amistades. Además, en esta misma época empieza a publicar sus primeros escritos en “Rheinisches Museum”. Entre los años 1873 y 1876 publica “Consideraciones intempestivas”, donde critica y alaba a la vez varias ideologías de varios filósofos. Después de publicar este libro, se centraría durante unos años en el mundo científico, llegando a publicar “Humano, demasiado humano”, escrito entre 1878 y 1879.


Durante los diez próximos años de su vida, se dedicará a viajar por muchos sitios como Alemania, Italia y Suiza, así como por la inspiración con la escribirá la mayor parte de su obra, centrándose en temas como el del eterno retorno, y la voluntad de poder, mientras reside en Génova y en Sils- Maria, pequeña localidad de los Alpes.


En los siguientes años, surgirán algunas de sus obras más representativas, como “La genealogía de la moral”, “Así habló Zaratustra” y “Más allá del bien y del mal”. En 1889 su salud empeora considerablemente, mostrando indicios de algún tipo de desiquilibrio mental. Durante una larga temporada, vivirá con su madre, mostrando una leve mejoría. Cuando la madre de Friedrich fallece en 1897, este se traslada a vivir con su hermana. Pero ya no se recuperará. Nietzsche, morirá en agosto de 1900, dejando así un gran cambio en el pensamiento filosófico contemporáneo.


Puntos clave de la filosofía de Nietzsche:


Una de las cosas más importantes de su filosofía, es la dura crítica que hacía a la cultura occidental, que según él estaba viciada desde el principio, y critica los mundos creados por el ser humano, que son el mundo racional, mundo moral y mundo religioso. A esto también se le llama el nihilismo filosófico.


Para Nietzsche había tan solo dos tipos de moral, la moral del señor y del esclavo. La moral del esclavo es la de las personas débiles, que se ven movidas por la humildad, la compasión y la paciencia, y que a su vez depende de una moral superior. Por otro lado, la del señor, que se centra en sí misma, la exigencia, y la afirmación de los impulsos vitales. Según Nietzsche, en nuestra sociedad hay más esclavos que señores, y para evolucionar habría que seguir la moral de los señores.


Además Nietzsche critica la religión cristiana, ya que según sus pensamientos, esta ideología nace del miedo que el propio hombre tiene de sí mismo, por lo que prefiere seguir y obedecer a otro más poderoso que él, que es Dios.


También nace el concepto del súper hombre, que es un hombre que ha dejado el rebaño donde vivía, para ser seguro, independiente y muy individualista.


Otro punto importante de su filosofía, es la del concepto de apolíneo y dionisiaco, que nace de dos dioses, Apolo y Dionisios. Apolo representa la serenidad, la medida y el racionalismo, muy relacionados con la tradición cultural griega. El segundo de los dioses, representa lo impulsivo, y el vivir la vida a pesar del dolor que esta pueda causar a las personas. Nietzsche, repudia lo apolíneo y reclama lo dionisiaco. Por eso reconocemos su filosofía como vitalista, que es cuando se desarrolla una filosofía a partir de la reflexión relativa a la vida.



 Aitana Castañedzsche


Colegio La Paz ,Torrelavega (Cantabria)


Imagen Best Selection of HD Wallpapers on ZHongyaoDQT.com


 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Queremos saber tu opinión. Se respetuoso y enriquece a la comunidad

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Comparte este contenido en las redes