viernes, 19 de abril de 2013

Book crossing, el arte de abandonar los libros


Marta González


El colegio Ntra. Sra. de la Paz, pretende fomentar el habito de la lectura mediante la técnica del BookCrossing o libro peregrino, que consiste en dejar “olvidado”un libro en alguna parte del colegio, que los alumnos lo encuentren, lo lean y después lo “olviden” de nuevo, en otra parte del centro ya sea en las aulas, los aseos o alguna otra dependencia como el gimnasio, los vestuarios, el hall o el patio. Vamos a intentar conocer quien fue el creador de este movimiento, en qué consiste y cuáles son los requisitos fundamentales para formar parte de esta comunidad.
La idea fue de Ron Hornbaker, quien la registró e inauguró en abril de 2001 en la pagina web bookcrossing.com. Al principio se unían unas cien personas por mes, pero hoy día se calcula que hay en el mundo unos 300.000 miembros. El sistema funciona del siguiente modo: cada libro que se libera tiene una etiqueta que se baja de Internet donde se le escribe un número, algo así como el DNI del libro en la cual pone en que consiste el movimiento.



Esta actividad ha conseguido en Estados Unidos y algunos países europeos convertirse en una moda, y fomentar así la lectura entre los ciudadanos.
Bookcrossing se podría definir como la práctica de dejar un libro en un lugar público para que sea recogido y leído por otros.
¿Y por qué alguien puede querer desprenderse de un libro? Posiblemente para que otro disfrute con la lectura de un libro determinado como lo hizo el susodicho.
Si alguien decide liberar un libro via BookCrossing, y así formar parte del movimiento, el libro tiene que ser registrado para conseguir un BCID (BookCrossing ID number) para que así figure en la lista de libros liberados. A la persona que luego encuentre el libro se le pide que se registre en la web de BookCrossing y que escriba una pequeña nota para notificar el hallazgo.
Ser miembro es totalmente gratuito, pero se aceptan donaciones para mantener los servidores.
El proceso es sencillo. En primer lugar, hay que registrar los libros en la página de Bookcrossing. Cuándo se registra un libro, a éste se le asigna un número de registro. Después, se pega una etiqueta al libro que debe llevar el número de registro e información sobre BookCrossing.
Las Zonas Oficiales de BookCrossing, que también pueden llamarse ZOBC están localizadas en lugares como las cafeterías, restaurantes u otro tipo de negocio accesible al público. Hace unos años, este movimiento fue criticado por J.Adams, una escritora que opinaba que reducía las ventas de libros y con ellos el dinero obtenido por los derechos de autor. Los miembros del BookCrossing se defendieron alegando que cuando uno de ellos, leía un libro que le gustaba, después compraba cierto número de dicho libro para que otros pudieran disfrutarlos.
Una nueva variante de BookCrossing es CDCrossing o DiscCrossing que consiste tal como indica su nombre en la misma actuación pero en vez de libros dejando CD’S o discos de música.
En España este fenómeno es aún reciente y los aproximadamente 3.000 adeptos que hay en nuestro país capitalizan su actividad en Barcelona, Madrid y Valencia. Un modo sencillo de compartir tus libros favoritos con el resto del mundo.
Para más información consulten la página oficial: BookCrossing.com
Imagen ourmoonwalks.blogspot.com

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