Lang Lang es uno de los mejores pianistas del mundo, posiblemente el mejor. Es conocido por actuar en la presentación de los juegos olímpicos de Pekín, en la entrega del premio Nobel de la paz al presidente de los Estados Unidos de América, Barack Obama, y por varias actuaciones en televisión, un ejemplo cercano es en el conocido programa español llamado “El Hormiguero”, mostrando sus grandes capacidades “pianísticas” ante 4 millones y medio de espectadores.
Nació el 14 de Junio de 1982, en la actualidad tiene 29 años, y comenzó a recibir clases de piano con una conocida profesora de piano llamada Zhu Ya-Fen, a los 3 años. Tuvo una dura infancia, ya que su padre era muy estricto con él y ya desde los 3 años le obligaba a dar 6 horas de clases al día, además su profesora siempre le decía que el no valía para nada, que era un inútil y que no iba a llegar a ser un pianista profesional, y quién le iba a decir que dentro de unos años llegaría a lo más alto. Cuando tenía 11 años, ya ganó su primer premio por su gran concierto en el Concurso Internacional de Jóvenes Pianistas, en Alemania. También, a los 13 años, tocó los 24 Estudios de Chopin, en el Teatro principal de Pekín y ganó otro premio de jóvenes promesas en Japón, tocando con la orquesta filarmónica de Moscú, y ya se veía claro que su futuro en el mundo del piano iba a ser muy satisfactorio. Un año más tarde, actuó como solista en el concierto de la Sinfónica Nacional del China, ante la atenta mirada del presidente chino.
“The Chicago Tribune” un prestigioso periódico de Chicago, le denominó como el más grande de todos los tiempos, que era mágico verle, era excitante verle con esa intensidad. Fue tal la imagen que dio a su país que hizo que unos 35 millones de niños empezasen a estudiar piano.
Una de las mejores anécdotas de Lang Lang es que toca una pieza de Chopin con una naranja, con una mano da las notas más agudas, y las graves lo realiza deslizando la naranja. Este pianista ha tocado con las mejores orquestas del mundo, empezando por la orquesta de Boston y Nueva York, pasando por la sinfónica de Sydney y la filarmónica de Israel y hasta la de San Petersburgo.
Una de las pasiones de Lang, es que le encanta enseñar y compartir su música con los niños más pequeños, y lo que hace es viajar por el mundo colaborando con Unicef y además el Fondo de las Naciones Unidas de la infancia le agradece la colaboración con los países del tercer mundo.
Lo que podemos analizar de esta persona, es que ha sufrido mucho en toda su infancia, con mucho trabajo y mucha presión por parte de sus padres, sin amigos, pero siguió adelante, sobreponiéndose a los problemas, llegando a ser una persona que lo tiene todo, y sin ser egoísta, trabaja con Unicef, entre otros, enseñando su música, y promoviendo el estilo clásico musical que le caracteriza. Gracias a él, muchos niños que le tienen de ejemplo, pueden conseguir su sueño.
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